El Alzheimer es una enfermedad que genera muchas alertas a medida que las personas envejecemos.
Es de amplio conocimiento que a medida que nos adentramos en la tercera edad, tanto el cuerpo como la mente comienzan a hacernos pasar malos ratos. Ya no son los mismos de antes.
Y de a poco estos cambios comienzan a ser más notorios, tanto para el afectado como su entorno.
La paciencia y cuidado hacia la persona y entre su red de contención, es el primer paso para que el tránsito por este recorrido sea digno, cariñoso y afectivo.
El envejecimiento de nuestro cuerpo es incontrolable. Nuestros órganos, células y cerebro empiezan a sentir el paso del tiempo. El cerebro se va degradando progresivamente, y aquello que parecía sencillo en nuestra juventud comienza a tornarse dificultoso.
Al ser un diagnóstico progresivo, es normal que estos síntomas vayan al alza con el paso del tiempo. Por esto, es fundamental entender que el proceso de darle nombre a las demencias, como el Alzheimer, puede ser un camino de largo aliento.
Primeros síntomas del Alzheimer
Si bien se suele pensar que al olvidar nombres, tareas o identificar a algunas personas podrían ser síntomas iniciales, estos son más amplios y debemos tomar con seriedad su reconocimiento.
Es importante observar los cambios en la memoria, la capacidad para resolver problemas, la realización de tareas rutinarias y la orientación en tiempo y lugar, y la persistencia de estos síntomas en la persona.
Dificultades en la memoria y el aprendizaje
Los primeros indicios del Alzheimer suelen aparecer con dificultades para recordar información recién aprendida. Este fenómeno se atribuye a cambios en el área del cerebro responsable del aprendizaje, dando lugar al olvido de eventos recientes, conversaciones y datos importantes.
Estos síntomas marcan el comienzo de un proceso neurodegenerativo que evoluciona a lo largo de un período que oscila entre 5 y 15 años.
Puedes revisar nuestra nota con los primeros 7 síntomas del Alzheimer en este link, que incluyen:
1. Cambios en la memoria que afectan la vida diaria
2. Dificultades para planificar y tareas rutinarias
3. Desorientación en tiempo y lugar
4. Problemas con el lenguaje y la escritura
5. Colocación incorrecta de objetos
6. Retraimiento de actividades sociales y laborales
7. Cambios en el estado de ánimo y personalidad
A qué edad comienza el Alzheimer
En la mayoría de los casos, la edad de inicio del Alzheimer es después de los 65 años. Sin embargo, existen casos menos comunes en los que la enfermedad puede comenzar antes, en lo que se conoce como la enfermedad de inicio temprano. En estos casos, los síntomas pueden aparecer en la década de los 40 o 50.
Es importante destacar que la edad exacta de inicio puede variar de una persona a otra, y la enfermedad progresa de manera diferente en cada individuo. Los factores genéticos y otros factores de riesgo pueden influir en la aparición del Alzheimer.
Cómo detectar el Alzheimer
Hasta el día de hoy el Alzheimer es diagnosticado mayoritariamente por la observación médica sobre las conductas del paciente, cuando ya presenta síntomas evidentes. Y la confirmación de la enfermedad suele ser posible mediante un análisis post mortem del tejido cerebral.
Una publicación realizada este año por el medio especializado JAMA Neurology, ha revelado que un análisis sanguíneo puede diagnosticar el Alzheimer con una precisión aproximada del 95%.
Esta investigación se enfoca en la detección de biomarcadores en sangre, buscando una alternativa menos invasiva y más accesible para el diagnóstico.
Revisa la nota completa sobre esta nuevo tipo de diagnóstico aquí.
Es importante destacar que el diagnóstico previo no es tan sencillo. El Alzheimer es un trastorno que se produce de forma lenta y gradual, por lo que pueden pasar años para que sus signos sean evidentes.
Además, muchas veces los síntomas tempranos de la enfermedad de Alzheimer pueden confundirse con los problemas del proceso normal de envejecimiento. Sin embargo, si los familiares prestan suficiente atención a algunos detalles, es posible reconocer si su ser querido se encuentra en una etapa temprana de Alzheimer.
Qué hacer si observa estas señales
No hay que ignorar cuándo se presentan estos síntomas, y es importante abordar con un médico especialista la cuestión.
Es relevante conocer que de las etapas del Alzheimer, la primera, llamada Enfermedad de Alzheimer Presintomática, es cuándo esta enfermedad comienza a afectar el cerebro, sin presentar síntomas externos.
En esta etapa presintomática, que puede durar años e incluso décadas, por lo general no hay manifestación en los pacientes de los síntomas, mientras en su cerebro ya se inicia el proceso de desarrollo.
Aunque no notarás ningún cambio, las nuevas tecnologías de obtención de imágenes del cerebro pueden identificar placas amiloides y ovillos neurofibrilares.
Los ovillos aparecen cuando las proteínas tau cambian de forma y se organizan en estructuras, que son características distintivas de la enfermedad de Alzheimer.
La posibilidad de identificar estos cambios iniciales es de especial importancia para los ensayos clínicos.
Cómo afrontar la enfermedad de Alzheimer de aparición temprana
La detección temprana y aplicar un plan de contención son sumamente útiles para aliviar los síntomas y ayudarle a mantener un nivel de independencia por más tiempo.
La enfermedad de Alzheimer tiene un gran impacto a cualquier edad, y más aún cuando se presenta a temprana edad. Las personas con enfermedad de Alzheimer de reciente aparición pueden descubrir que otros no creen que tengan la enfermedad o cuestionan el diagnóstico.
Las personas con Alzheimer pueden perder relaciones o trabajos porque no han sido diagnosticados con una enfermedad neurológica que afecta su funcionamiento. También pueden enfrentarse a una pérdida de ingresos por haber recibido el diagnóstico mientras aún trabajaban.
Por ello mismo, considerar un diagnóstico médico temprano, diseñar un plan de contención y estimulación pueden ser de gran ayuda.
Recursos de apoyo
Los elementos clave de la atención médica de la enfermedad de Alzheimer son la educación y el apoyo. Esto es particularmente válido en la enfermedad de Alzheimer de inicio temprano, dados sus desafíos específicos.
Vincularse con grupos de apoyo puede ayudarte a identificar recursos, obtener una comprensión más profunda de la discapacidad y aprender maneras de adaptarse.
Busca siempre generar redes de apoyo, y no enfrentar este desafío de manera solitaria. Hay muchos recursos disponibles para ayudar tanto al afectado, como a la familia y posibles cuidadores.
En las primeras etapas de la enfermedad, es importante investigar y establecer un plan para controlar su progreso. Contar con un plan y sentir el apoyo de la red familiar más cercana son claves para dar contención y un mejor futuro.
Si te interesa conocer más te invitamos a leer otras notas de nuestro blog sobre Alzheimer.
En Villa Soleares queremos entregar cuidado, protección y bienestar a los pacientes de Alzheimer y sus familias.