Advertencia: Tu navegador no soporta JavaScript! Validación: una alternativa de comunicación. - Villa Soleares - Alzheimer y Tercera Edad

Validación: una alternativa de comunicación.

La Validación es un método desarrollado por Naomi Feil, Miembro de la Academia de Educadores Sociales Diplomados en EEUU, entre 1963 y 1980, y que hoy en día está tomando fuerza debido a sus altos logros en cuanto al manejo de pacientes con diagnóstico de Alzheimer. Desde algunos años se reconoció que intentar llevar a […]
2016-08-03

La Validación es un método desarrollado por Naomi Feil, Miembro de la Academia de Educadores Sociales Diplomados en EEUU, entre 1963 y 1980, y que hoy en día está tomando fuerza debido a sus altos logros en cuanto al manejo de pacientes con diagnóstico de Alzheimer.

Desde algunos años se reconoció que intentar llevar a este tipo de personas a la realidad, la cual para ellos es confusa y desorientadora, provoca en ellas sensación de ansiedad y frustración, teniendo como resultado conductas desadaptativas; como  agresividad, labilidad emocional, agitación, entre otras. En contraste, la validación es un camino que favorece el bienestar de las personas con demencia.

Cuando se Valida, reconocemos que los sentimientos de una persona, es decir que lo que está sintiendo, efectivamente son experimentados y al mismo tiempo son guiados y acompañados. Es por esto que se debe utilizar la empatía para lograr sintonizar con la realidad (subjetiva), para así fomentar la confianza y seguridad en sí mismo (lo que siente realmente lo vivencia). De esta manera, aportaremos un espacio donde la persona a la que validamos, perciba que sigue siendo respetada en sus apreciaciones, vivencias, opiniones y sentimientos; fortaleciendo su confianza y disminuyendo el nivel de estrés propio de la cronicidad y desorientación que genera la enfermedad. Escuchando con empatía, reconociendo y validando sus sentimientos ayudaremos a reducir este estrés.

Las personas que desarrollen esta técnica deben aprender a no juzgar los actos de las personas mayores y respetar su historia de vida, reconociéndolos como seres que han ganado sabiduría a lo largo de ella. Sin ser paternalistas se les acompaña en sus momentos de desorientación sin el afán de traerlos a la realidad, sino más bien, oír las preocupaciones que los aquejan, ayudándolos a encontrar una solución. Cada persona es un mundo, por lo que es imprescindible escuchar sus necesidades y darles respuestas que sean acordes con sus requisitos.

Por todo lo anterior se sugiere estar atento al tipo de conducta que presenta la persona, los sonidos que emite, frases que pueda estar repitiendo con mayor frecuencia, algún movimiento en particular que suela realizar y tratar de indagar en ellos con el fin de llegar al origen de éstos. Esta información habla en profundidad de la historia de vida de la persona y serán las raíces de lo que se espera solucionar, en esta la última etapa de su vida. Desde ahí nace la técnica de Validación, aceptando que existen aún preocupaciones del pasado que emergen al presente para ser resueltas y mitigadas, a las cuales debemos darles espacio de resolución y escucha. Así lograremos que se sientan seguros y amados, en un espacio de confianza.